BARRICK, INVERTIRÁ US$450 MM EN LA REMEDIACIÓN AMBIENTAL EN PUEBLO VIEJO
En 1999 el Estado dominicano se enfrentó a los estragos de la quiebra de la compañía minera Rosario Dominicana y a la contaminación ambiental que resultó de un proceso de explotación inadecuado y del incumplimiento de los requisitos de cierre de mina, que incluía la rehabilitación de los suelos minados.
Según explicó el presidente de Barrick Pueblo Viejo, Manuel Bonilla, en la provincia Sánchez Ramírez se registra el mayor daño medioambiental del mundo minero actual, cuyo costo de remediación ha sido estimado por la empresa en US$450 MM y será ejecutado a lo largo de sus operaciones en el país.Desde el inicio del proceso de instalación de Barrick en el municipio Cotuí, hace cuatro años, la empresa ha procesado 115 metros cúbicos de suelo contaminado, de los que 78,000 han sido tratados y reutilizados en la rehabilitación de los terrenos de la zona, y el resto ha sido procesado y debidamente almacenado para ser exportado a un país donde se le pueda dar el tratamiento adecuado, porque en República Dominicana no existe un sistema que permita procesar ese tipo de desechos.
Uno de los principales problemas ambientales que ha provocado la actividad minera en Pueblo Viejo es la contaminación acuífera con ácido sulfúrico, producto del arrastre del material sulfuroso hacia los afluentes, que ha provocado una variación del PH (grado de acidez) de las aguas de 7 a 2, lo que resulta incompatible con cualquier tipo de vida animal.
Bonilla explicó que a partir del inicio de la producción minera, a mediados de este año, las aguas ácidas serán almacenadas en embalses de recolección y reutilizadas en el procesamiento del material extraído de la mina. El excedente será procesado en una planta de tratamiento, y devuelto a los afluentes de la zona con el nivel de potabili- dad requerido por los estándares medioambientales.
Tecnología
Asimismo, el empresario resaltó que Pueblo Viejo es una de las cinco minas del mundo en las que se ha incluido la tecnología de autoclave, que funciona a modo de una gran olla de presión y permite el proceso de oxidación de los sulfuros en un solo contenedor para evitar que el material entre en contacto con el medioambiente.
“En el autoclave el mineral se mezcla con oxígeno líquido, se sube la temperatura a unos 240 grados centígrados y se eleva la presión a unas 700 libras por pulgadas cuadradas; luego se agita el mineral con el oxígeno para provocar una oxidación acelerada de los sulfuros. En una hora se logra el resultado que a la naturaleza le toma millones de años”, explicó Bonilla.
Esa tecnología permite separar el oro y la plata y extraer el ácido sulfúrico, que luego es sometido a un proceso de neutralización con cal, producida a partir de roca caliza de la misma mina, y transformado en yeso (un material completamente inocuo).
Bonilla señaló que el proceso utilizado anteriormente consistía en la simple trituración de la roca, que al entrar en contacto con el oxígeno y el agua forma el ácido sulfúrico que es arrastrado por la lluvia a los afluentes, y ha provocado el mencionado efecto del ‘río coca-cola’.
“La minería de hoy no se parece a la de hace 25 años, los procesos han evolucionado”, sostuvo.
ReforestaciónLos suelos en los que se ha concluido la exploración han sido reahabilitados, recubiertos con una capa vegetal y reforestados.
Según explicó el gerente de comunicaciones de Barrick, Jorge Esteva, ese mismo procedimiento se seguirá con cada zona en la que se culminen los trabajos de extracción de metales.
La empresa ha instaurado un vivero en el que se cultivan 20,000 plantas al mes para transplantarlas en las áreas minadas una vez terminados los trabajos y reestablecido el suelo. Durante el proceso de indentificación de las plantas nativas, se han encontrado 17 especies de las que no existía ningún tipo de documentación, según explicó Bonilla.
Ese mecanismo de replantación paulatina permitirá que al cerrar las últimas zonas de la mina, las primeras ya hayan sido replantadas y la recuperación total del terreno sea mucho más rápida y efectiva.