Basado en el famoso sermón de Fray Antón de Montesinos en defensa de los nativos de la isla de La Hispaniola, diezmados y finalmente exterminados por el colonialismo español, el multipremiado artista Carlos Hinojosa cuelga en la galería Mesa Fine Arts 16 piezas realizadas en papel, en las que sigue afianzando su impronta conceptual y ahondando en su estética, estructurada bajo los preceptos de un profundo lirismo, de mensaje perturbador, provocador de catarsis e involucramiento iconográfico por el espectador.
Discípulo de dos memorables maestros de la plástica dominicana, Domingo Liz y Gaspar Mario Cruz, Hinojosa tiene como aval destacable, el haber sabido sortear las posibles influencias de sus mentores, logrando el mérito de construir su propio lenguaje distintivo, que de manera persistente se refiere a personajes encarnados por figuras femeninas, enfrentadas a un mundo hostil y marginal en el que Hinojosa se sumerge con un espíritu reivindicador, pero devolviendo al espectador, pese a su atmósfera de denuncias de fuerte impacto, un halo de optimismo que nos reconforta, al promover una mejor visión de la equidad de género y redoblar la denuncia de la terrible violencia que se ejerce en su contra, sin correcciones pertinentes.
Ganador de primeros premios en concursos, entre los que se destacan el Concurso E. León Jimenes de 2000 y la Bienal de Artes Plásticas de 1999, así como otros galardones obtenidos en eventos nacionales con la FAO y en la Escuela Nacional de Bellas Artes en su proceso de formación artística y profesional, Hinojosa, quien naciera en Cotuí en el 1962, ha recibido asimismo elogiosos comentarios críticos por su trabajo visual de reconocida calidad técnico visual, gran trabajo compositivo y buen dominio de lo conceptual en sus planteamientos pictóricos.
DEDICADA AL MAESTRO JOSÉ GAUSACH
Tierra Mansa, de Carlos Hinojosa, forma parte del programa de exposiciones simultáneas agosto-diciembre que desarrolla Mesa Fine Arts en el 2012, y está dedicada al maestro José Gausachs, con motivo de cumplirse el 53 aniversario de su fallecimiento, ocurrido el 27 de julio de 1959. El expositor, en los trabajos de la muestra de referencia, utiliza como germen inspirador aspectos trascendentes de la historia dominicana en lo atinente al paso de la cultura petrificada a los graves conflictos que enfrentaron nuestros primeros pobladores contra el cruel invasor que conculcó y exterminó la raza primigenia, materia prima con la que el creador pictórico coteja un mundo visual reflexivo y conceptual, de una historia que marcó con luto y dolor nuestra génesis como país “civilizado”.
Con esta simbólica muestra de gran poder ideológico y carácter social, Hinojosa continúa explorando con acierto sus grandes posibilidades creativas y su estilo de evocaciones fragmentadas, en el que se aprecia en lo técnico el granulado del soporte de sus piezas, reveladoras de las huellas que impregna la tiza sobre el papel, dejando degradaciones colorísticas, piezas en las que sobresalen sus dramáticos personajes de ojos implorantes, de ceño fruncido y trágica visión, ante un destino de inocultable maldad, creados con una atmósfera e impactante lirismo.
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