Para Minelys Ortega, el arte lo es todo. Envuelve todo su universo en un ambiente de colores, donde solo existe la creatividad, inspiración, y en el cual su imaginación no tiene límites.
Oriunda de Cotuí, esta joven llegó a la capital para estudiar arquitectura, en ese proceso empieza a desarrollar aptitudes en el dibujo, planos y diseños, sin embargo no es hasta el final de su carrera cuando descubre que lo que realmente le apasionaba era la pintura y con la cual más tarde se ganaría la vida.
Por cuestiones personales tuvo que interrumpir sus estudios universitarios, sintiendo que necesitaba desarrollar algo que la llenará mucho más, por lo que decidió comenzar a pintar. Primero inicia con cuadros pequeños que sus amigos o personas cercanas le pedían que hiciera, hasta que su talento la llevó a obtener una ayuda financiera para estudiar en Altos de Chavón.
Ortega describe su recorrido de dos años en esta escuela de diseños como una experiencia inolvidable, en donde pudo explotar al máximo todo su talento, además entendió que pintar era lo que verdaderamente quería hacer durante toda su vida, ahora de una manera profesional.
Obteniendo el título de Bellas Artes e Ilustración, la artista regresa a su ciudad natal, para continuar con sus sueños de seguir pintando, hasta la fecha ya ha realizado más de 500 cuadros y poco a poco se está haciendo muy conocida por su gran talento.
“Lo que más me gusta de pintar es el proceso, porque disfruto mucho dibujar, seleccionar los colores, mezclar, imaginar y plasmar una historia en la tela, luego que termino la pieza, me desenamoro y me enamoro de la próxima que voy a realizar”, confiesa Minelys.
Minelys pasa horas y horas pintando, descuidar sus uñas o chispearse la ropa no le preocupa con tal de realizar el trabajo que el cliente le pide. Algunas de sus pinturas son encargos que las personas le dicen que pinte, mientras que otras son hechas de su propia inspiración. Semanalmente puede desarrollar entre 20 y 40 cuadros, todos con precios muy variados, ya que depende del tamaño y el tipo de pintura que utilizará.
Artistas: contadores de historias
Para ella tomar un pincel es como tomar un lápiz y contar una historia, cada artista lo hace de manera distinta, pero con el objetivo principal de deleitar al público y que este entienda lo que sucede en el interior del pintor y de la sociedad.
“Todos los días hay algo que pintar, ya que siempre en el mundo pasa algo nuevo que te motiva a plasmarlo en el papel o en un cuadro”, expresa la artista.
La joven manifiesta que desde los inicios del arte se podía observar que todas las pinturas hablaban lo que se estaba viviendo en su época, en vez de las noticas o el internet, como sucede actualmente, las personas se enteraban de lo que pasaba con las obras de artes.
El año 2014 fue muy especial para Minelys, ya que pudo organizar su primera exposición artistística individual en la Casa de la Cultura de Fantino, Cotuí, en la que presentó algunas de sus mejores pinturas.
Madre ante todo
Desde que Ortega se alejó de la arquitectura, ya han pasado nueve años, en el mismo sucedió un acontecimiento que marcó su vida para siempre, el de convertirse en madre. Darien es el nombre de su hijo, quien ha acompañado a Minelys en todos los pasos que ha dado en la pintura.
“Ser madre es un gran privilegio. Mi hijo Darien Anubys es mi mayor fuente de inspiración para la realización de mis piezas de arte. De igual manera él con su corta edad me asesora y me ayuda dentro de sus conocimientos sobre mis decisiones en cuanto a mis obras. Me encanta el hecho de que está creciendo dentro de este ambiente y que le gusta lo que a mí me apasiona”, declara la artista. Gracias a la venta de sus pinturas ha logrado, con la ayuda de su familia sacar adelante a su hijo.
Pinturas modernas
Minelys reconoce que las pinturas van evolucionando con el tiempo, porque son el reflejo de la realidad de cada artista, para ella evolución significa crecer y alejarse de lo tradicional, por lo que admite no le tiene miedo a innovar y pintar cuadros que se salgan de lo común.
((Motivación
Obras de artes con inspiración
Su hijo Daren es su principal objeto de inspiración, por quien pinta y vende sus cuadros para poder criarlo, además indica que es de gran orgullo para ella verlo crecer cada día.
Por otro lado sus propias vivencias en la vida son de gran motivación para esta joven artista, siendo de gran utilidad para ella a la hora de pintar, incluso algunos de sus cuadros son el rostro de ella misma.
El cielo, las estrellas, el espacio, las flores, los animales, las frutas, el medio ambiente, la niñez, el ser humano y la astrología son otros de los elementos que son incluidos en algunos de cuadros que Ortega pinta.
Minelys dice que si tuviera que cambiar algo de la sociedad sería las brechas tan colosales que existen entre las clases sociales: los pocos que tienen mucho versus los muchos que tienen poco.