Una estafa nacional


por oscarlin figueroa
En la campaña presidencial del año 1996 el hoy ministro de planificación y desarrollo de la presidencia Temito Clé Montas recordemos todos que planteaba que le dieran la oportunidad al PLD de dirigir el país para en tan solo tres meses solucionar el problema eléctrico de la nación, meses que se han transformado en tres periodo de gobierno y en la complejidad del problema.
Con la llegada del Dr. Leonel Fernández a la presidencia de la república su gabinete asume el modelo económico el neoliberalismo donde empresas e instituciones de estado pasan a manos privada “para mejorar su funcionamiento” con la llamada “capitalización” que no son mas que contratos leonino y entreguistas que lesionan la soberanía nacional, como fue el caso de las EDES. (Compañía distribuidora de energía)

                 Si bien es cierto que el país tenia déficit de energía eléctrica ante del 1996 no es meno cierto que hoy el problema eléctrico se ha convertido en uno de los mas acuciante para los dominicanos y fundamentalmente para el sector productivo de la nación que depende de la energía electica para la elaboración de sus productos o servicios, sin embargo los que consumen menos energía son los mas afectados como es el caso de las pequeñas y medianas empresas y las familias pobres, en razón de que la grandes empresas y las familias propietarias de estas tienen su sistema eléctrico privado o un circuito privilegiado y algunos llegan al extremos de preparar grandes fraudes para no pagar la factura que consumen.
                  Nosotros entendemos que el situación electica como la mayoría de los problemas de la República Dominicana, es un problema político que no va tener solución hasta tanto la mayoría de los dominicanos no entendamos que los gobiernos encabezados por los tres partidos político que nos han dirigido durante los últimos 46 años no nos representan, solo tienen compromiso con las elites del país y con sus propios bolsillos.
Si tienes ronchas
 Fue porque te pico la Jibijoa.
Espera la próxima picada